Málaga, 27 de febrero de 2023 – Los empleados de la cementera de Málaga, propiedad de Votorantim Cimentos, han cerrado el segundo año de adhesión al programa de voluntariado corporativo con un total de 320 horas al servicio de la comunidad local. Esta iniciativa se enmarca en el Plan de Responsabilidad Social Corporativa de la compañía, enfocado a ser un buen vecino en el entorno inmediato.
El programa para fomentar el voluntariado entre los empleados de la fábrica de cemento de Málaga está en marcha desde 2021 y cuenta con la colaboración de seis asociaciones del entorno: Banco de Alimentos de la Costa del Sol (Bancosol), Madre Coraje, Fundación Harena, Arrabal, GEA y AMFREMAR (Asociación de Amigos Malagueños de Familias de Rehabilitados y Marginados). Todas ellas, con una larga y comprometida trayectoria con algunos de los colectivos más vulnerables de la zona y entre las que los empleados pueden elegir participar como voluntarios en acciones relacionadas con el medio ambiente, la atención a personas mayores, la clasificación de alimentos y ropa, y la formación y mentoring, entre otras.
Para Tomás Azorín, responsable de RSC de Votorantim Cimentos, “estamos muy orgullosos de la implicación de todos los trabajadores que forman parte de la fábrica de cemento de Málaga, que de forma altruista ponen su tiempo y entusiasmo al servicio de la sociedad. Acompañados de las seis asociaciones con las que colaboramos en este proyecto nos hemos marcado el objetivo de contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas más vulnerables de nuestro entorno”.
Compromiso con el entorno
El Plan de Responsabilidad Social Corporativa de la fábrica de Málaga, de Votorantim Cimentos, es el paraguas que enmarca su compromiso de buen vecino y de contribución a mejorar la calidad de vida de los habitantes de su entorno, basado en la transparencia, el diálogo y la colaboración en las distintas iniciativas que se llevan a cabo en él. Fruto de ello es la pionera Comisión de Sostenibilidad, un foro de debate entre la empresa, las administraciones públicas y las asociaciones de vecinos de La Araña, Jarazmín, El Candado, El Palo y La Cala del Moral, representadas.
La empresa, también ha renovado su colaboración con la entidad AMFREMAR (Asociación de Amigos Malagueños de Familias de Rehabilitados y Marginados), que atiende anualmente a más de 200 familias necesitadas de la barriada malagueña de El Palo a través de su comedor social, su economato y su centro de atención para niños. Además de esta participación, la compañía lleva a cabo otras acciones en el entorno de la fábrica para fomentar la concienciación ambiental entre los más pequeños a través de su programa de “Economía circular: una responsabilidad de todos” y de iniciativas que pretenden dar a conocer la rica biodiversidad del entorno de la mano de Fundación Tormes. También contribuye a fomentar el deporte con el apoyo a clubes tan emblemáticos como el CB El Palo, donde participan unos 450 niños y jóvenes.
En el mundo de la cultura, destaca la colaboración que la planta de cemento mantiene con la Fundación Málaga y la Fundación CEM, el patrocinio del concurso de pintura de La Cala, así como con otras actividades organizadas por colectivos vecinales como las verbenas populares del entorno.